Por: psicóloga Michelle Sesín
En la actualidad, cada vez se habla más de la conexión que existe entre el intestino y el cerebro. No hay duda de que cuando existe algún tipo de ansiedad, muchas personas pueden sentirlo en su estómago y existe una gran relación entre los nervios y estas sensaciones tan conocidas, incluso en el lenguaje se escucha el hecho de “traer revuelto el estómago” y “mariposas en el estómago”. La ansiedad es una sensación que se manifiesta de muchas maneras, y existe una parte clave en el cerebro que se dispara cuando nos sentimos ansiosos, la amígdala. Esta parte del cerebro es especialmente afectada cuando existen cambios en el microbioma intestinal, de hecho la conexión entre la amígdala y el microbioma es tan fuerte que varios investigadores creen que los profesionales de la salud mental deberían de tener especial atención en el microbioma para estabilizar la hiperactivación de la amígdala y así reducir la ansiedad.
La dieta poco sana ocasiona que la serotonina en el cerebro se reduzca en algunas regiones, aumentando la posibilidad de experimentar ansiedad.
En el presente artículo, se proponen diferentes incorporaciones y eliminaciones a la dieta para mejorar la ansiedad. Primero se presentan tipos de comida que se deberían de evitar para poder tener un nivel de ansiedad bajo.
Alimentos que evitar:
Se ha comprobado que una dieta alta en grasa y en carbohidratos puede cambiar los químicos del cerebro y llevar a experimentar ansiedad.
La cafeína, ya que sobre estimula regiones del cerebro que procesan el peligro, además de que apaga una parte del cerebro que ayuda a regular la ansiedad. Se recomienda menos de 400 mg al día para tener los niveles bajos.
El alcohol es otra bebida que se debería de evitar al tener ansiedad.
El gluten es otro alimento que ha sido comprobado que al reducirlo, también se reducen los niveles de ansiedad, ya que se ha encontrado una gran correlación entre las personas celíacas o con intolerancia al gluten y la ansiedad.
Alimentos, minerales, vitaminas que ayudan con la ansiedad:
Alimentos ricos en fibra y fermentados. Este tipo de alimentos reduce la inflamación de todo el cuerpo, incluido el cerebro. El arroz integral, las papas, las moras, almendras, alcachofas y el amaranto son sólo algunos tipos de comida alta en fibra que pueden ayudar con la ansiedad.
El omega 3 es sumamente beneficioso para la ansiedad ya que reduce la inflamación.
Triptófano, el cual es un aminoácido esencial para la nutrición se ha comprobado que ayuda en la ansiedad. Puede ser tomado en suplemento o en forma de alimento como los garbanzos. Combinado con algún carbohidrato, también se ha demostrado más beneficioso ya que se absorbe mejor en el cuerpo.
La vitamina D, B1, B6, A, C y E. Además del magnesio, el potasio y el selenio son vitaminas y minerales sumamente buenos para este tipo de problema.
Aunado a todos estos alimentos que son de beneficio para la ansiedad, también existen hierbas y especies que pueden ser útiles para los síntomas como la manzanilla, la pasiflora y la lavanda. Además, la cúrcuma también ha sido demostrada eficaz junto con la pimienta negra ya que reduce la ansiedad y protege al hipocampo.